Recuerdo cuando comencé a trabajar con plantas ornamentales, creía que tenía todas las herramientas para hacerme cargo. Realmente sabía muchas cosas, pero hubo un tiempo en el que me encontré gestionando trabajadores, diseñando y ejecutando los planes de trabajo, varios invernaderos enteros y cada uno con más de 180 camas, repletas de inventario: pothos, Philodendron, Aglonemas, Begonias, Zamias, suculentas de todo tipo y otras especies y variedades. En ese momento prácticamente estaba yo sola, y debía echar mano de todos los recursos que tenía para gestionar bien el tiempo, y tener mucho ojo visor para darme cuenta de los «muchos detalles», que se ven sencillos, pero llevan mucho tiempo, y fallé con el manejo del riego. Resulta que el proceso no fue tan fácil como lo creí al comienzo.
Todos en algún momento llegamos a pensar que regar es muy simple, sólo debes poner agua y ya, y luego volver a hacerlo. Créeme, es un error pensar de esta manera.
Por falta de una estrategia clara, metí la pata hasta el fondo y tuve muchos problemas con pudriciones en ciertas variedades, y lo complicaba el hecho de que había diferentes sustratos en una misma cama y también en la misma sección de riego. Realmente fueron momentos de mucho estrés.
Dicen que hay growers secos y growers húmedos… Tuve que aprender a no ser ninguna de las dos cosas.
Lo bueno fue que, en ese camino, algunas personas estuvieron ahí para ayudar, y me llevaron al lugar preciso en el que aprendí esta técnica, y todo resultó para mi más alto bien y crecimiento.
Quiero evitar que manifiestes estos errores con el riego, y para eso sólo se necesita tener un sistema, parámetros claros a seguir y ciertas acciones simples. De hecho, cualquiera podría seguirlos y evitar los sesgos y decisiones subjetivas.
Se necesitó bastante ensayo y error para calibrar todo y saber cuándo era el momento preciso de regar cada variedad. Esto no depende nada más del tipo de planta sino también del tipo de sustrato, el clima y ciertos factores humanos.
Tener un título de agrónomo me dio muchos conocimientos, pero realmente los afiancé con la práctica y también gracias a otras personas que me ayudaron para aprender más y mejor.
La técnica en esta guía es realmente efectiva y muy sencilla. No importa si eres principiante o un Doctor en agricultura, ya que sirve para todos por igual